Ángeles de sonrisa y melena resplandeciente desfilaron el miércoles por la noche en lencería fina para el primer evento parisino de la marca estadounidense Victoria’s Secret, en presencia de estrellas como Stromae, Lenny Kravitz, Vincent Cassel o Inès de la Fressange.
El desfile, en el gigantesco atrio de acero y vidrio del Grand Palais de París, abrió con una orquesta de cuerdas que tocaba suavemente desde el interior de una inmensa estructura con la forma del Arco del Triunfo. Cuando empezó el show, luces neón en rojo inundaron la pasarela y la calma se rompió con música de rock y multitudes que aplaudían.
La modelo sueca Elsa Hosk salió pavoneándose en un bustier corto, envuelta en un dragón rojo chino tridimensional; Kendall Jenner —en rojo sangre— usó botas delgadas por encima de la rodilla, un sujetador de escote ancho y alas de ángel en ante. Gigi Hadid se veía como si fuera a emprender el vuelo, llevando una capa deportiva con un patrón azteca que ondulaba mientras caminaba.
Lady Gaga dio una interpretación conmovedora de «Million Reasons», besando a la madre de Hadid, la estrella de televisión Yolanda Hadid, en su asiento de primera fila cuando terminó su actuación. (Antes del desfile, Gaga compartió una foto de sí misma con ropa interior plateada de Victoria’s Secret con sus seguidores de Instagram).
Bruno Mars, usando la pasarela como su escenario, tuvo huéspedes brincando arriba y abajo en una interpretación funky de «24K Magic».
El sostén de 3 millones de dólares
El brasier Fantasy de Victoria’s Secret, portado por Jasmine Tookes, de 25 años, es considerado la cereza del pastel del desfile de la marca.
El sujetador, con miles de piedras preciosas, se presentó como la joya de la Corona antes del evento. Una increíble obra de arte, fue diseñado por Eddie Borgo y fue un trabajo manual de 700 horas con gemas del joyero AWMouzannar.
«Es tan hermoso. Está cubierto en diamantes blancos y esmeraldas, y tiene alrededor de 9,000 piedras preciosas. Cuesta tres millones de dólares —es maravilloso», dijo Tookes tras bambalinas mientras la peinaban. Tookes agregó que la pieza fue construida sobre un molde de la parte superior de su cuerpo. Literalmente, hecha a la medida.
Rompiendo con los usos y costumbres del mundo de la moda, las modelos desfilaron sonriendo y portando alas para merecer el apodo que identifica a las caras de la marca: «ángeles'».
Via: La Prensa Gráfica
Fotos: Elle
